Son totalmente inconscientes del efecto que producen sus palabras, las que pronuncian bajo impulso de su honradez compulsiva, con la franqueza y seriedad de un niño de seis años.
Resultarían conmovedores, si no fueran tan exasperantes.
Pero cuando apuntan bien, sus tiros llegan más allá de las estrellas, al lugar donde nacen realmente todos los sueños.
Tenles paciencia y adopta un Sagitario.

300 páginas
6 cm x 5 cm
Tapa blanda